domingo, 27 de septiembre de 2009

Medico sin frontera. (part 2)

12:27:00


Laura estaba decidida. No le importaba los mas mínimo las múltiples y variadas razones que todas las personas cercanas le habían argumentado. Ella se había propuesto ir a buscarle. Hacia ya dos años que Mario se marchó, y lo que es peor, llevaban cuatro meses sin ningún tipo de noticia sobre el. Todo estaba ya preparado, mañana de madrugada salía el avión, y Laura estaba obcecada a seguir los pasos de su novio hasta descubrir que le podía haber ocurrido.

Flotaba un olor extraño en el ambiente. Laura no sabía muy bien a que, pero se iba haciendo cada vez mas insoportable, e impregnaba el aire hasta volverlo denso y difícil de respirar. El aeropuerto donde habían aterrizado, si es que aquello se podía llamar aeropuerto, se asimilaba mas bien a una especie de mercado ambulante. Toda la pista de aterrizaje estaba tupida de personas ofreciendo todo tipo de cosas. Incluso se ofrendaban a ellos mismos. Así es como Laura conoció a Sahim, nada mas poner un pie fuera del destartalado avión el se la acercó y cogió sus maletas. Laura no se atrevió a decir nada, simplemente le siguió hasta una pequeña y ruinosa construcción. Ya en el interior el hombre le indico con la mirada una silla y una especie de refresco. Ella le observó con atención, era un hombre enorme, de casi dos metros de altura, vestido con una túnica roñosa y vieja. Pero había algo en sus ojos que desprendía cierta calidez, algo que te hacia suponer que era una buena persona.

"He sido contratado para guiarla tras los pasos del Doctor Mendoza", y sin decir una sola palabra mas aferró de nuevo las maletas, subimos a un obsoleto todoterreno y nos encaminamos hacía la selva, no pararíamos hasta el lugar donde pasaríamos la noche. El último paraje mas o menos civilizado que veríamos en dos o tres semanas.

(Continuara...)

lunes, 21 de septiembre de 2009

Medico sin frontera.

19:42:00


Era un día normal, en un barrio normal, de una ciudad normal. Entre tanta normalidad, algo sucedía en una de las casas situadas en hilera a lo largo del río. Mirando por una de sus ventanas, concretamente la de la habitación de Mario, se podía ver a este preparando afanosamente su equipaje. ¿A donde se marchaba Mario?, preguntaría de forma automática cualquier avispado lector. Pues nuestro personaje, habiendo concluido hace ya tres largos e interminables años la carrera de medicina, con un expediente mas que razonable, y estando totalmente desmoralizado por la falta de actividad, había tomado la decisión de marchar como médico voluntario a la mas salvaje y a la vez mas necesitada selva de la India. Mario no sabía lo que tan singular e inhóspito paraje le podía deparar, pero eso le daba igual, el solo añoraba ser útil y no sentir cada día que era una carga para sus padres.

Esa tarde no hacía buen tiempo, es mas ni siquiera el sol había asomado en el brumoso cielo. Casi era mejor así, el buen tiempo no casa bien con las despedidas. Si, era la hora de las despedidas. Sabía que le costaría mucho decir adiós a sus padres y a sus amigos. Pero lo que de verdad le inquietaba era despedirse de Laura. Ella era una chica muy sensible y seguro que no podría evitar llorar. Pero tenía que hacerlo, no podía echarse atrás, ahora no.

No miró atrás, se había preguntado muchas veces si podría hacerlo. Pues bien, lo hizo. Ahora está volando hacia una aventura que no tiene el menor indicio de como acabara.

(Continuará...)

lunes, 7 de septiembre de 2009

Sol y Luna

9:31:00


La luna está cantando tristes canciones de amor,
el sol la escucha, sus rayos le tornan abrasador.
La luna se va apagando, ahí llega su amor!,
el sol está ardiendo, no aguanta el dolor!.
La luna dice adiós al melancólico pensador,
el sol da la cara por un beso de su amor.